Muchos dicen que el animal print está de moda, pero la realidad es que hace ya tiempo que no deja de estarlo. Es un hecho: el estampado animal se ha convertido en un básico.
Abrigos, americanas, jerseys, pantalones, botas, botines, bolsos y en todos los complementos imaginables, las firmas y marcas de moda nos presentan infinitas opciones para lucirlo.
Como no todo el mundo se atreve con él, hay un pequeño consejo que no falla: empezar llevando un accesorio (unas gafas, un fular, unos zapatos…. ). De esta manera nos acostumbraremos a incorporarlo a nuestro look sin darnos cuenta y no nos costará nada “arriesgarnos” después.
Desde el Centro Comercial Ruta de la Plata, apostamos por las versiones de animal print menos habituales: los estampados de cebra o de tigre están menos vistos que el de leopardo, y nos cansaremos menos de llevarlo.
Vestido de animal print en azul de Amichi
Los colores neutros –blanco, gris, nude, camel o negro- son estupendos para combinar con nuestro estampado favorito de la temporada. También el borgoña es una buena opción.
Pero si a ti lo que te va es arriesgar, valora las combinaciones con otros estampados como las flores o rayas. También la posibilidad de jugar a combinar un mismo estampado en dos colores o un mismo color en varios estampados, todo ello, solo apto para fashion victims. La clave en estos casos está siempre en elegir la misma gama cromática.
Total look de Pull and Bear
Otra clave para llevarlo es hacer de él nuestro aliado y adaptarlo a nuestro cuerpo.
El animal print es muy llamativo y dirige la atención hacia el lugar donde lo estás usando. Así que lo recomendable, es que no lo llevemos en aquellas parte de nuestro cuerpo que queramos disimular.
Por ejemplo, si somos de caderas anchas, lo suyo es que nos lo pongamos en una blusa o chaqueta, o en un pantalón o falda si nuestro caso es el contrario. Si no somos especialmente altas, mejor usarlo en pequeñas dosis.
Pero si solamente tienes pensado hacerte con una sola prenda de estampado animal, nuestra recomendación es una camisa. Es toda una inversión, seguro que la usarás durante todo el año.
Y olvídate de aquello de que el animal print no es adecuado para ir a trabajar. Unos pantalones fluidos o una falda, pueden ser la prenda perfecta para ir a la oficina.