Hace unos días celebrábamos el “Día de la felicidad” y comprobábamos que, afortunadamente, en el Centro Comercial Ruta de la Plata, no andamos mal en esto de la felicidad.
Aún así, nunca está de más descubrir y recordar algunas prácticas que nos pueden llevar a mantener o lograr este estado de bienestar y plenitud que conocemos como felicidad.
Los países nórdicos son expertos en ello, y si ya hace un tiempo que llevamos oyendo hablar del Hygge –filosofía que encuentra la felicidad en las pequeñas cosas-, lo último en cuestión de dicha se llama Lykke.
Lykke significa “felicidad” en danés, y es que Dinamarca está declarado como uno de los países más felices del mundo. Estas son algunas de sus claves:
- Disfruta de sentarte a la mesa
Cenar a la luz de las velas, cuidar la presentación y decoración (una buena mantelería y cubertería) y sobre todo disfrutar sin prisas de los nuestros en torno a la comida; es una manera de cuidar el sentimiento de pertenencia, de unión.
De está forma además disfrutamos de la comida desde la serenidad y el gusto, no como un mero trámite para cubrir una necesidad.
- Preocúpate de conocer a los que te rodean
Los vecinos, la persona que te pone el café todos los días en el bar, compañeros de trabajo… da los buenos días, las gracias, pregunta cómo están… el sentimiento de comunidad y promover actividades colectivas hace que nos sintamos felices.
Más claves de felicidad en el libro “Lykke: en busca de la gente más feliz del mundo”. Podemos encontrarlo en Eroski.
- Desconecta de los aparatos electrónicos
Por paradójico que parezca, la conexión nos provoca desconexión del mundo real y de nosotros mismos. Márcate un tiempo cada día sin usar tus dispositivos, especialmente en fines de semana y periodos vacacionales.
Disfrutarás mucho más de lo y los que te rodean, así como de ti mismo.
- Vive la experiencia
Viajes, conciertos, cenas, paseos… no escatimes en disfrutar los momentos y experiencias y en hacerte con una buena colección de recuerdos.
Las vivencias es la mejor inversión que podemos hacer para nuestra felicidad.
- No preguntes, ayuda
No te limites a ofrecer tu ayuda, seguramente esa persona a la que se la estás brindando nunca nos la pida aunque la necesite. Sin embargo, es probable que agradezca tu mano si eres tú quien toma la iniciativa.
Sé empático con todas las personas en general, basta con ser amable y educado.
- Muévete todos los días
No es una novedad, pero un paseo de 30 minutos cada día, una clase de yoga o un poco de ejercicio, hará que nos sintamos mucho mejor.
Tan sencillo y tan difícil esto de la felicidad…