Autobronceadores

Hace un tiempo los autobronceadores eran ese producto que nadie quería comprar porque los resultados, según cuentan las malas lenguas, eran una auténtica catástrofe. Ahora se convierten en el producto estrella, ya sea verano o invierno. ¿Por qué? Porque realmente para conseguir un tono de piel dorado ya no hay necesidad de tostarse al sol durante horas. Si sabes cómo aplicar este producto podrás despreocuparte por completo de parecer un fantasma los primeros días de playa.

Te contamos cómo conseguir unos resultados óptimos, ¡atenta!

  1. El primer paso que se debe llevar a cabo, ya que el autobronceador cubre la primera capa de la epidermis, es exfoliarnos de arriba abajo el cuerpo. Así eliminaremos las células muertas de nuestra piel. Deberás hacer especial hincapié en zonas como rodillas y codos.
  2. El segundo paso, aplicarlo con la piel totalmente seca. Nada de salir de la ducha y utilizar este producto porque nuestros poros están abiertos y lo que queremos conseguir es que el autobronceador no cale en nuestra piel como una crema hidratante.
  3. El tercer paso, utilizar guantes si no quieres que se queden restos entre tus dedos. De todos modos, si lo aplicas directamente con las manos, sólo tienes que asegurarte de lavarlas bien inmediatamente después de aplicarlo.
  4. El último paso, aplicar dos capas del producto con un intervalo de media hora entre una aplicación y la siguiente. El mejor momento es hacerlo antes de meterse en la cama para conseguir una total absorción.